Según la OMS, más de 4 mil millones de personas en la Tierra sufren de parásitos. Esta infección masiva se explica por la subestimación del problema, la educación insuficiente de la población, el diagnóstico y tratamiento ineficaces de los pacientes.
Todos los parásitos que pueden causar enfermedades en los seres humanos se pueden dividir en tres grandes grupos:
- Protozoo o Protozoo. Hay bastantes variedades de ellos, pero solo unos pocos están muy extendidos en todo el mundo: lamblia, toxoplasma, Trichomonas.
- Gusanos o helmintos. En los países de la CEI existen lombrices intestinales, oxiuros, toxocaras, trichinella, tenias porcinas y bovinas, equinococos, trematodos felinos y otros.
- Ectoparásitos (parasitan afuera) - piojos con piojos, garrapatas.
La infección del cuerpo humano con parásitos del último grupo es bastante fácil de notar, pero los protozoos y gusanos a menudo se convierten en una "sorpresa" para sus "dueños".
¿Por qué son peligrosos los parásitos?
La mayoría de los parásitos viven mucho tiempo y se multiplican activamente en el cuerpo humano, por lo que las enfermedades causadas por ellos adquieren un curso crónico y recurrente. En este caso, los órganos afectados dejan de funcionar por completo, la inmunidad disminuye y el paciente se vuelve más vulnerable a las infecciones.
Como resultado, el cuerpo de una persona infectada con parásitos está agotado, debilitado, envenenado por toxinas parasitarias y alérgico. Estos procesos, por supuesto, no se desarrollan a la velocidad del rayo, sino años de ignorancia sobre la presencia de una plaga en el cuerpo y, en consecuencia, la ausencia de tratamiento causa graves problemas de salud.
¿Cómo puede infectarse?
Conocer las principales formas de contraer parásitos es una oportunidad para protegerse y mantenerse saludable. Si nos centramos en los patógenos comunes en los países de la CEI, la lista de posibles rutas de transmisión de estos parásitos en humanos será la siguiente:
- A través de manos sucias.
- A través del agua sucia (incluso al nadar en ella).
- A través de verduras y frutas sin lavar.
- A través de carne y pescado crudos o insuficientemente cocidos.
- Contacto con un animal infeccioso.
- Contacto sexual (así se transmite la tricomoniasis).
¿Cómo sospechar la presencia de un parásito en una persona?
Cada parásito se caracteriza por su propia localización en el cuerpo humano, respectivamente, y una clínica especial de la derrota de uno u otro órgano. Sin embargo, se pueden distinguir varios signos que son comunes a todas las helmintiasis y algunas enfermedades causadas por protozoos.
Intoxicación
Su aparición está asociada a la actividad vital del parásito en una persona, son los productos que secreta los que envenenan el cuerpo del paciente. Esto se manifiesta por dolor de cabeza, debilidad, náuseas, disminución del apetito, irritabilidad.
Alergia
La mayoría de las veces es una erupción cutánea que aparece y desaparece y no responde bien al tratamiento dermatológico. Esto puede manifestarse como diátesis en los bebés. El origen de tal erupción también se explica por los efectos de las toxinas del parásito en el cuerpo. Si una persona es alérgica, la infección por gusanos puede causar manifestaciones más graves: hinchazón de las membranas mucosas, ataques de broncoespasmo, etc.
Pérdida de peso
Este síntoma es especialmente pronunciado en los niños que parecen comer bien, pero no aumentan de peso, no pierden peso y, al mismo tiempo, se ven completamente demacrados. La razón de la disminución de peso radica nuevamente en la competencia por los nutrientes del cuerpo del paciente con las lombrices.
Hipertermia periódica
Además, la temperatura no sube mucho, hasta 37, 5. Esto sucede en el contexto de la ausencia de signos evidentes de algún tipo de enfermedad.
Trastornos intestinales
Esto es flatulencia, estreñimiento, diarrea, ruidos y dolor en el abdomen. Muy a menudo, estos síntomas se explican por la presencia de disbiosis y no se tratan con éxito con antibióticos y fármacos bacterianos.
Anemia
Los parásitos dentro de una persona se alimentan de ella, por lo tanto, los nutrientes, micro y macro elementos, así como las vitaminas, a menudo consumidas por el paciente, no son suficientes para satisfacer las propias necesidades del cuerpo. El primer signo de tal deficiencia es la falta de hierro en la anemia, que se manifiesta por palidez de la piel y las membranas mucosas, mareos.
Variación en las preferencias alimentarias, antojos de dulces
Estos fenómenos también pueden explicarse por la falta de ciertos nutrientes en el cuerpo del paciente.
La aparición de estos signos, tanto más todos a la vez, debería alertarlo y obligarlo a consultar a un médico.
Métodos de diagnóstico y protección
Debe tenerse en cuenta de inmediato que cualquier método alternativo para detectar parásitos en el cuerpo humano (por ejemplo, el método Voll anunciado) no puede considerarse como una fuente confiable de información. Por lo tanto, solo puede confiar en el examen microscópico de las heces y en análisis de sangre múltiples y específicos para detectar la presencia de anticuerpos contra gusanos y protozoos individuales. Esto último se puede realizar en laboratorios privados.
Para evitar convertirse en víctima del parásito, una persona debe seguir reglas simples:
- Lávese las manos siempre y en todas partes con agua y jabón.
- Solo hay verduras, frutas y hierbas que se lavan a fondo o, mejor aún, se escaldan con agua hirviendo.
- No beba agua cruda.
- No nades en aguas fangosas.
- Es obligatorio realizar un tratamiento térmico completo de los productos cárnicos y pesqueros.
- Lave periódicamente los juguetes de los niños, y los que hayan estado afuera, por ejemplo, en una caja de arena, deben desinfectarse.
- Revise anualmente a las mascotas en busca de parásitos.
Remedios parasitarios
Los médicos recomiendan la profilaxis de los gusanos 2 veces al año con preparaciones especiales. Sin embargo, es imposible prescribirse arbitrariamente a uno mismo, y más aún a un niño, tales medicamentos, ya que todos son tóxicos no solo para los gusanos. Por lo tanto, debe consultar a un médico sobre la posibilidad de usar este o aquel medicamento y su dosis.
Si se confirma la presencia de un parásito en el cuerpo humano, vale la pena buscar un buen parasitólogo que prescriba un régimen de tratamiento eficaz, ya que tomar un solo medicamento no suele ser suficiente.